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Con el arte en mente, la primera experiencia en una agrupación musical lo fue con un pequeño grupo del pueblo de Barranquitas conocida como Tempo Merenguero. Más adelante Manny Manuel fue reclutado por la agrupación que entonces encabezaba el popular dúo de merengue Mayra y Celinés. Con ellas el joven orocoveño se destacó como solista y bailarín de la orquesta. Pero uno de sus pasos más importantes en el arte se dio cuando posteriormente se unió a Los Sabrosos del Merengue.

 

La popular agrupación introdujo con éxito a Manny Manuel al mundo discográfico, respaldada por el sello MP. Con su peculiar timbre de voz, el carismático artista grabó "Fiera callada", canción que colocó a Los Sabrosos en el puntal de la popularidad. Tras el éxito obtenido en esta primera grabación, el productor del grupo decidió aumentar su repertorio con Manny grabándole en el compacto "Sin fronteras" los temas "La chica de la escuela", "Ya te olvidé", "Cosas de enamorados" y "El día que me acaricies". Junto a éstas, la balada "Te amo", popularizada originalmente por Rocío Dúrcal, pasó a ser un éxito rotundo en la versión merenguera que interpretaba el joven orocoveño.

Con la aprobación popular, una nueva producción con Los Sabrosos titulada "Haciendo historia" le dio nuevas fuerzas a Manny como cantante. Difundiendo los temas "Frente a frente", "Con todo y mi tristeza", "Colegiala" y "Quién puede ser", la suerte de Manny ya estaba sellada en el ambiente artístico nacional.

 

Confirmada su popularidad, el paso hacia una carrera propia ya era inevitable. En junio de 1994 Manny concluyó su labor con Los Sabrosos del Merengue y el 11 de octubre de ese mismo año Manny Manuel se enfrentó a su historia al debutar oficialmente con su orquesta como cantante solista. Esa noche, Manny Manuel dejó de ser el carismático integrante de un grupo musical, para convertirse en toda una primera figura de la canción popular.

Una grabación titulada "Rey de corazones", distribuida por Merengazzo Records, dio la señal para lo que estaba por verse. En cuestión de semanas Manny Manuel y su debut discográfico como solista harían historia en el mercado puertorriqueño, otorgándosele Disco de Platino por sus impresionantes ventas.

 

Contando con los arreglistas más cotizados del género, entre los que se encontraban Manuel Tejada, Jaime Querol, Ramón Orlando y Juan Valdez, la grabación adquirió gran popularidad a través de temas como "Mi problema", "Estrellita", "Los hombres no deben llorar", "Pero qué necesidad", "Se acabó lo que se daba" y el tema título de la grabación "Rey de corazones".

Con la aprobación popular certificada, Manny Manuel llegó en noviembre de 1995 a debutar en el Centro de Bellas Artes de San Juan. En un caso insólito en el arte popular, su debut en la exclusiva Sala Antonio Paoli, marcó su primer aniversario como solista. Y con la producción de César Sainz, el boricua logró agotar seis funciones en dicho centro artístico, algo no logrado por merenguero alguno con anterioridad.

 

En 1996 Manny reforzó su presencia discográfica en el mercado nacional con el lanzamiento de la producción "Auténtico". Contando con la producción ejecutiva de Ralph Mercado, la segunda grabación de Manny como solista ganó notoriedad con los temas "Y se que vas a llorar" y "Mi primer beso".

 

Integrándose al elenco de artistas de Producciones Ángelo Medina, Manny presentó en mayo de 1996 el concierto "Un regalo para las madres" en el Centro de Bellas Artes en Guaynabo, mientras en noviembre de ese mismo año debutó en grande en el Coliseo Roberto Clemente.

 

El año cerró de manera espectacular para el artista cuando formando parte del elenco de estrellas que participó en el concierto "Al compás de un sentimiento", en homenaje al compositor Pedro Flores, su interpretación del bolero "Querube" se convirtió en un éxito radial. Mostrando su versatilidad musical, "Querube" expuso a la nueva generación esta pieza clásica de la autoría del inmortal Pedro Flores. El mismo marcó la segunda incursión de Manny públicamente con el trío Los Condes ya que la idea de grabar con el popular trío se dio cuando meses antes habían coincidido en el programa televisivo "Estás invitado" que encabezaba Marilyn Pupo en el canal 6 de WIPR.

 

Al llegar 1997, Manny debutó con éxito en Altos de Chavón en la República Dominicana. Allí, en la cuna del merengue, el cantante sagitariano agradeció a sus hermanos antillanos por darle al mundo un género como el merengue. Y en gesto de hermandad caribeña, declaró a la concurrencia: "Soy un coquí que canta merengue", en clara referencia a uno de los símbolos patrios de su Puerto Rico.

 

Luego de actuar en Fiesta Broadway en los Estados Unidos, y en el Festival de Acapulco en México, Manny unió su voz a la del cantautor puertorriqueño Antonio Cabán Vale "El Topo" para grabar "Lo que mi pueblo atesora". Con aires de música típica, esta producción vio la luz en la Navidad de 1997. Y en ella el intérprete vio coronada su oportunidad de grabar uno de los géneros que más ama: su música campesina.

 

Maestro de la versatilidad musical, su arte no se ha limitado al merengue exclusivamente. En su repertorio Manny también ha abordado la salsa, como ocurrió en 1997 con la grabación del clásico "Payaso", popularizado en Puerto Rico en 1971 por la orquesta La Selecta de Raphy Leavitt. De la misma manera el compacto "Manuel y el Trío Borinquen" presentó al cantante interpretando ocho boleros con tríos de cuerdas. Un compendio de cinco de sus éxitos vio la luz en una edición "remix" para discotecas realizada por DJ Abbott y DJ Costello.

 

Todos estos aciertos discográficos se unieron entonces a otras grabaciones que ya se habían abierto paso en el mercado nacional. "Manuel solo", por ejemplo, que recopiló sus exitosos años con Los Sabrosos del Merengue. En "Homenaje tropical a Los Beatles" , el orocoveño grabó su versión merenguera "Dame la mano y ven (“I Want to Hold Your Hand)". Y en el especial "Siempre Piel Canela", Manny interpretó algunos de los clásicos del repertorio del inmortal Bobby Capó.

 

En 1998 la innegable versatilidad musical del artista se asomó en la producción "Es mi tiempo". Con una preventa de 150,000 unidades, la producción inició su ofensiva en las ondas con la promoción de "Cómo duele". A la difusión de este nuevo merengue, se unió entonces la presentación de temas como "Margarita", "Por el amor de una mujer", "Desvelo de amor" y el clásico de Alejandro Sanz, "Corazón partío". Ganador de Disco de Oro en España, la grabación antecedió una serie de presentaciones por la Península Ibérica.

 

Al llegar 1999, un renovado Manny Manuel retomó exitoso rumbo en Puerto Rico al lanzar el compacto "Lleno de vida". La producción, que le mereció una nominación al Grammy en la categoría de merengue, inspiró su regreso al Coliseo Roberto Clemente donde recibió aplausos de la prensa especializada y donde grabó su primer disco en concierto.

 

Justo a finales de dicho año Manny Manuel se embarcó en una gira de promoción por Islas Canarias.  En esa región de España el artista puertorriqueño se presentó en cada una de las siete ínsulas que componen el grupo. Por tal razón el reconocido cantante ingresó al famoso libro Guinness de récords como el único intérprete en lograr tal hazaña. Meses después, Manny se trasladó a la península ibérica. En la Madre Patria el carismático boricua conquistó el público español con su música al presentarse en programas de radio y televisión. En esos medios el artista promovió “Vivir así es morir de amor”, tema que en otra época popularizó Camilo Sesto. Al tiempo que permanecía cumpliendo con sus compromisos artísticos en la tierra del Quijote, Manny Manuel fue galardonado con el premio “Selección Cadena Radial” al ser escogido por la audiencia española como uno de sus cantantes preferidos. 

 

Con la llegada de un nuevo siglo, el popular cantante se radica brevemente en la ciudad de Los Ángeles, California. En el verano de 2000 editó “En vivo”, grabación de su concierto en el Coliseo Roberto Clemente y, dos años más tarde debuta en el sello Universal presentando su compacto “Manny Manuel”. Pero su golpe decisivo lo sería la producción “Serenata”, disco con el cual demostró una vez su capacidad innata para acoplarse a diversos estilos musicales. En la grabación, editada en noviembre de 2003, el orocoveño se entregó a la nostalgia y el romanticismo de la década de 1950, al abordar una selección de clásicos del cancionero hispano acompañado por un trío. Bajo la dirección musical de experimentado guitarrista y requintista puertorriqueño Máximo Torres, Manny vocalizó impostergables melodías románticas como “Besos de fuego”, “Miénteme”, “Y…”, “Fichas negras” y “Alma adentro”, entre otras.

 

La refrescante antología de éxitos del ayer, se ubicó rápidamente en los primeros lugares de ventas a solo semanas de haber sido ubicado en los estantes de las tiendas de discos. Así, con la promoción de cortes como “Bajo un palmar” y “Celos de ti”, “Serenata” sobrepasó las 100,000 unidades vendidas y le dio pie a un nuevo concierto en el Coliseo Roberto Clemente el 14 de febrero de 2004.

 

Al exitoso lanzamiento de “Serenata” le siguió como secuela un nuevo acierto titulado “Nostalgia” en noviembre de 2004. En él Manny Manuel repitió su fórmula de éxito afianzándose en el cancionero con sus versiones de clásicos boleros como “Nuestro juramento”, “Dos almas” y “Amor robado”.

 

Para cerrar la primera década del siglo XXI, Manny Manuel dio un salto al pop presentando su disco  titulado “Tengo tanto”. La grabación, producida por Andrés Castro para el sello Universal, tuvo amplia difusión con los temas festivos “No me hagas sufrir” y “Fuego”, así como el dueto con la cantante española Chenoa, “Sin remedio”. El disco, editado en septiembre de 2007, fue destacado por la Fundación Nacional para la Cultura Popular como una de las producciones más sobresalientes del año.

 

Ya en el cierre de la década, el cantante inició una nueva campaña promocional con su disco “Rayando el sol”

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