top of page

Este gran músico es hijo de Albertano Valentín (m. en 1981) y Carmen Fred (m. en 1947). Tiene seis hermanos. Su infancia y gran parte de su adolescencia transcurrieron en Coamo, razón por la cual se identifica como coameño. Su padre era cuatrista y le inculcó la vocación musical. A la edad de siete años inició el aprendizaje de la guitarra de manera autodidáctica. Entre los trece y los quince, formó parte de un trío que completaban dos compañeros de la Escuela Secundaria. Para aquellas fechas (1954-1955) cursó estudios de Trompeta y Solfeo en la Academia de Música José Ignacio Quintón, donde fue discípulo del profesor Juan Suárez Cruz.

 

En 1955, Bobby fue a vivir a Nueva York con la intención de ampliar sus conocimientos musicales, pues en Puerto Rico todavía no existía el Conservatorio. Durante sus primeros tiempos en la Gran Urbe se adiestró como trompetista y en la lectura musical con profesores particulares. Procuraba su sustento tocando de manera intermitente con formaciones de escaso cartel y desempeñando labores ajenas a la música. En 1958, ya convertido en ejecutante muy competente, encontró acomodo en el Conjunto Cachana de Joe Quijano.

 

Su pasantía por aquella agrupación se extendió un año, al cabo del cual pasó a la orquesta de Charlie Palmieri, en la que permaneció hasta 1960. En lo sucesivo, formó parte de las encabezadas por Vicentico Valdés (1960-1961); Willie Rosario – en la que comenzó como trompetista, estrenándose luego como contrabajista – (1961-1963) y Tito Rodríguez (1963-1964). Es preciso señalar que a esta última organización ingresó como ejecutante de la trompeta y el trombón de pistones. Pero, encontrándose de gira en Venezuela, debió reemplazar al contrabajista, quien había enfermado. Y, poco después (1964), con Tito, grabó como ejecutante del contrabajo por primera vez. Después integró la Charanga Moderna de Ray Barretto (1964-1965). Valga resaltar el dato de que nuestro biografiado aprendió a tocar este instrumento de manera autodidáctica.

 

En 1965 fundó su primera orquesta, en la que tocaba la trompeta. Marcelino Morales Jr. fue el vocalista original. Los denominados “salseros de la mata” recuerdan que, entre sus miembros originales, figuraban el timbalero Joey Pastrana y su hermano David (conguero), quienes luego de participar en el álbum-debut del naciente colectivo, “El mensajero”, editado por el sello Fonseca Records, se separaron y formaron la que sería exitosa banda identificada con el nombre del primero. Para su suerte, Bobby Valentín logró conquistar la preferencia de los bailadores de inmediato. Durante los siguientes cuatro años recorrió todos los salones de baile de la plaza neoyorquina y de ciudades aledañas.

 

Paralelamente, desarrolló una intensa actividad como sesionista, participando en grabaciones de otras orquestas. También, fue uno de los primeros artistas en ser reclutado por Johnny Pacheco y Jerry Masucci para el elenco de la recién creada compañía Fania Records – “Young Man With a Horn” (LP-332) fue la primera producción que registró bajo esta etiqueta – y, naturalmente, integró la plantilla original del que sería mundialmente aclamado colectivo Fania All Stars (1967).

 

En 1969 se radicó definitivamente en Puerto Rico y, desde entonces, se ha concentrado en la ejecución del bajo. En su patria se apuntó su primer exitazo con el tema “Huracán de pasión”, original de Tite Curet Alonso, cantado por Frankie Hernández. En lo sucesivo, proyectándose desde la plaza Borinquen, se desplazaría a Estados Unidos, Centro y Sudamérica e, incluso, Europa, tanto frente a su orquesta como integrando la Fania All Stars. También se desempeñaría como arreglista de otras formaciones y solistas.

 

Tras culminar el contrato que lo ataba al ya poderoso consorcio Fania, en 1975 se dispuso a materializar el sueño que abrigaba desde hacía largo tiempo: fundar su  propia compañía discográfica. Entonces creó Bronco Records, bajo la cual continúa editando sus grabaciones. Igualmente, ha editado varias de otros destacados músicos, entre ellos Willie Rosario, Raphy Leavitt & La Selecta y el bolerista Jaime Umpierre.

 

El éxito económico de esta empresa le permitió incursionar en otros negocios por lo que, en determinados momentos, fue propietario de El Tropicana Club – en sociedad con Willie Rosario – en Hato Rey, de la concurrida Cafetería El Yauco en la Calle Cerra de la santurcina Parada 15 y hasta accionista de una radioemisora.

 

Una de las etapas más brillantes de su trayectoria musical fue cuando tuvo como vocalista de su banda a Cano Estremera (1978-1984), uno de los soneros más extraordinarios que ha conocido la historia salsera. “La boda de ella”, “Manuel García”, “El muñeco de la ciudad”, “El caimán”, “El gato”, “Awilda” e “Ingratitudes” quedaron perpetuados en su voz como estándares del género. No obstante, el cantante más fiel e identificado con el sonido que implantó hace ya cuatro décadas y media ha sido Johnny Vázquez, quien su incorporó a la orquesta en 1975 y todavía figura en su plantilla. “Libro de amor”, “Luna mensajera”, “Linda Teresa”, “Tu rica boca” e “Y después me matas” son apenas algunos de los títulos con que más lo identifica su inmensa pléyade de seguidores.

 

En 1985 se acreditó un precedente muy significativo: el tema “Cantaré con una orquesta”, original de Pedro Arroyo y vocalizado por Rafú Warner, fue el primero que motivó la realización de un vídeoclip en la historia de la salsa. Dicha pieza pertenece a la producción “Algo excepción” (Bronco, BR-135).

 

Durante la década de 1990, Bobby integró a sus producciones a otros vocalistas, aunque manteniendo a Johnny como cantante principal. Giovanni Lugo, Tato Peña, Wichy Camacho, Josué Rosado y Héctor Iván Rivera, entre ellos. Pero, con éstos no ha generado jitazos comparables a los que se anotara con Marvin Santiago (1971-1975); Luigi Texidor (1976-1978); Rafú Warner (1981-1986) y Luisito Carrión (1985-1989), además de los antes mencionados Hernández y Estremera.

 

Valentín ha sido acreedor a todos los galardones que, en nuestro País, se otorgan a los artistas populares consagrados. El 17 de octubre de 1987, por ejemplo, fue objeto de un lucido homenaje en el Coliseo Roberto Clemente con motivo del 22 aniversario de su orquesta. Excepto Cano Estremera, todos los vocalistas que alguna vez desfilaron por su organización se unieron a aquel inolvidable reconocimiento.

 

El 16 de septiembre de 1991 festejó el 25 aniversario de su orquesta con dos conciertos alusivos celebrados en el Centro de Bellas Artes de San Juan. Otra vez, excepto Estremera, en estas funciones participaron todos los cantantes que habían trabajado con él. El día anterior había recibido un reconocimiento por parte de la Legislatura. Finalmente, su reencuentro con el controversial pero talentosísimo “Dueño del Soneo”, tan ansiado por la masa salsómana, acontenció en el Primer Festival Mundial de la Salsa que el productor Rafo Muñiz presentó en el Anfiteatro Tito Puente el 22 de agosto de 1997.

 

De su primer matrimonio con Vilma Blasil, son frutos Roberto Jr., Liza y Richard. En 1980 se unió a Oria Iris Rivera. Con ella procreó a Roberto Carlos (n. en 1985), quien es percusionista. 

bottom of page